Lo que me gusta llamar el pilar de la cocina costarricense. Un platillo delicioso, sencillo pero magnífico, que podemos servir solo o como acompañamiento, como parte de un almuerzo o como opción de comida preparada para guardar en el congelador y tener a la mano como salva tandas. La receta es “pochotona” porque nadie quiere hacer o comer solo un poquito.
Ingredientes:
2 kilos de muslitos de ala (en las ferias del agricultor se consigue pollo de pastoreo de excelente calidad)
2 kilos de papa amarilla cortada en cubos
2 cebollas grandes cortadas en cubos
1 chile dulce cortado en tiras
1 rama de apio
3 tomates
1 zanahoria grande cortada en rodajas
6 dientes de ajo
2 ramas de tomillo
1 rama de oregano
1 cdita de comino en polvo
1 cda de azúcar crudo Zukra
Aceite de girasol
Sal y pimienta al gusto
½ taza de culantro fresco picado
Preparación:
Para empezar con esta delicia, vamos a necesitar una olla grande, de fondo pesado. Calentamos un par de cucharadas de aceite y vamos a sellar los muslitos de ala en tandas, para que se doren y no suelten agua.
Los ponemos de 3 en 3 o 4 en 4, dependiendo del tamaño de la olla. Los doramos por ambos lados y los retiramos. En ese fondo “pegadito”, vamos a saltear el ajo, la cebolla, el chile dulce y la rama de apio, junto con el orégano y el tomillo.
En cuanto comiencen a dorar, volvemos a poner el pollo en la olla y cocinamos a fuego medio durante unos 5 minutos, revolviendo para que no se pegue.
Agregamos el tomate y tapamos, para dejar que se mezclen los jugos. Luego de otros 5 minutos añadimos las papas y la zanahoria, el comino, el azúcar y un par de tazas de agua.
Vamos a tapar y reducir el fuego a bajo, para cocinar durante 25 a 30 minutos, de manera que las papas se comiencen a deshacer y el pollo se despegue un poquito del hueso. En el último hervor salpimentamos al gusto. Ya apagado, agregamos el culantro por encima.
Podemos acompañar con arroz blanco recién hecho, o quitar todos los huesos y servir con tortillas para comer gallitos. Puedes preparar la recetota incluso si es solo para vos, porcionar en contenedores y congelar, y así te quitas una preocupación de encima durante la semana.
A todas y todos los agricultores del país: feliz día. Y recuerda que el mejor homenaje que puedes darles es visitar las ferias del agricultor y consumir productos locales.
