Ya sabemos que sí, es lo más usual del mundo usar los bananitos que se van poniendo muy maduros en panes y queques. ¿Alguna vez los has utilizado en un budín? El budín de pan es delicioso, y con bananito, solo sube el nivel. Aprovechá los pedacitos de pan añejo que has ido acumulando durante la semana, y prepará esta delicia.
Ingredientes.
4 tazas de miga de pan añejo (si lo prefieres, podés eliminar la corteza, y usarla para preparar polvo de pan para empanizar).
1 pizca de sal
1 cucharadita de polvo de hornear
1 cucharadita de canela en polvo
1 cucharadita de clavo de olor en polvo
2 huevos
4 bananos bien maduros, pelados y hechos puré
1 ½ tazas de leche
1 barra de mantequilla
½ taza de Zukra orgánico
La ralladura de una naranja
Preparación.
Precalentá tu horno a 375 °C. En una olla mediana, calentá a fuego medio la leche, la mantequilla, la ralladura de naranja y el azúcar, removiendo constantemente para disolver el azúcar y derretir la mantequilla, sin dejar que hierva. Retirá del fuego y reservá.
En un tazón grande, incorporá todos los ingredientes secos: la miga de pan, la sal, el polvo de hornear, el clavo y la canela. Agregá los huevos y el puré de banano, e incorpora la leche con una cuchara de madera, para disolver grumos y hacer una mezcla uniforme. Colocá en un molde previamente engrasado y lleva al horno durante 35 minutos. Si lo deseás, podés agregar más mantequilla y azúcar por encima, y activar el modo “broil” del horno para hacer una costrita encima del budín.
El budín es versátil: se puede comer tibio o frío, sirve para acompañar postres, para comer con helado y hacer tostadas francesas. También podés envolverlo muy bien en plástico de cocina y congelarlo por hasta 2 meses.
